Antología

 

Antología 

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Evaluación segundo cuatrimestre

 

Evaluación segundo cuatrimestre 

El segundo cuatrimestre fue un poco diferente al anterior. Si bien el contexto pandémico continuó, esta última parte del año me encontró más acostumbrada y con menos incertidumbres. Después de un tiempo, una comienza a naturalizar la mesa del living convertida en un bunker de estudio, la constante búsqueda de cargadores, la computadora que nunca se apaga. Los mates y las ventanas abiertas hacen de compañía en la rutina facultativa. 

Hoy me da menos miedo escribir. Siento que pasó muchísimo tiempo - y de hecho así fue - desde la primera vez que me senté en frente de una página en blanco para esta materia. A lo largo de estos meses ejercité la creatividad, la autocrítica y la confianza en lo que hago. 

Miro mi blog y no lo puedo creer: 60 publicaciones. Si me lo hubieran dicho a principio de año hubiera dicho que no llegaba. Pero lo más importante es que además de haberlo logrado, disfruté mucho el proceso. Esta materia fue la articulación perfecta entre trabajo y distención. 

Me llevo mucho de este recorrido, autores, recursos y herramientas para la escritura. Además de tiempo compartido y un pasito más en el trayecto por mi carrera. En lo que comprende la interacción con mis compañeros y compañeras, creo que escuchar al otrx y valorar el trabajo ajeno es un ejercicio no sólo para la comunicación sino también para la vida. 

Me alegra, sinceramente, haber coincidido con esta materia en este año tan particular. Gran experiencia. 

Respuesta final a Mickey Mouse

 

Consigna: La contestación final del personaje que recibe la propuesta: Si la acepta, utiliza los recursos de la paradoja y la metonimia. Si la rechaza, utiliza la paradoja y el sarcasmo. 

Mickey Mouse:

Más allá de nuestros desacuerdos, me alegra mucho seguir escribiéndonos, además esto de las cartas me parece muy vintage, me encanta! 

La realidad es que me resultó muy difícil tomar una decisión con respecto a tu propuesta debido al momento tan duro que estoy pasando. Cuando recibí tu primer contacto me tomó por sorpresa, para serte sincera me dió algo de malas energías, pero como dice mi abuela "Es de mala suerte ser supersticioso" asique lo volví a pensar. Pero seguía sin estar segura.

Pero hace poco cumplí 39 años y tuve una revelación, es momento de volver a mis raíces, y que mejor hacerlo en uno de los lugares que impulsó mi carrera. Es por eso que hablé con mis asesores y juntos decidimos aceptar la propuesta de musicalizar una de tus películas. 

Sin embargo, tengo algunas condiciones. Además de hacer la canción principal, quiero hacer el doblaje de la protagonista ya que entiendo que va a ser una película animada. Mi segundo requisito es trabajar con Miley, para poder limar asperezas del pequeño incidente con el papel de Hannah Montanna (ella sería la coprotagonista, obviamente). Y por último, como recordarás, durante las grabaciones solo puedo comer cosas color verde, por cábala. 

Estoy muy agradecida de volver a trabajar con ustedes, y que suerte que no dejaste de insistir conmigo. Se ve que Disney siempre sabe lo que hace. 

Me despido con muchas ansias, 

Britney. 

Escena de lectura

 

3 años

Nunca hay tiempo en la ciudad de la furia. El sol empieza a quemar y la gente llena las calles, trabajadorxs y estudiantxs caminan al ritmo que dicta la producción. La inercia lxs lleva sin pensar en dirección a sus destinos diarios. Nadie mira para el costado, nadie mira para adentro. Colectivos, subtes, taxis. Celulares, carteles, publicidad. A veces parece que hay tanto ruido para no pensar. ¡Corre! Que llegás tarde, siempre tarde. Empieza otro año, parece prometedor. Y de repente, pausa. 

Pausa.

El año que paró el reloj. Ya no hay excusa, porque si hay algo que sobra es tiempo. 

Siempre me gustó leer, había algo en esa idea que me movía. Dejé de hacerlo durante muchos años, porque -irónicamente- "no tenía tiempo". Una evasiva, un pequeño auto boicot que por algún motivo todxs nos hacemos con cosas que nos gustan, una mentira piadosa para quedarse en la comodidad. 

Hace algunos años algo me empezó a incomodar. Me hacía preguntas y no me gustaban las respuestas. El nombre de Ángeles Rawson me quedó tan grabado como el zócalo rojo del noticiero en que lo leí. Tal vez fue porque vivía cerca del chico que me gustaba, o porque la encontraron adentro de una bolsa a la vuelta de mi colegio, o tal vez fue porque cuando fui a inglés particular esa semana mi profesora con la voz quebrada nos contó que en una de las sillas vacías de mi aula se sentaba ella el año pasado. Tal vez fue todo junto, pero tal vez no fue nada de eso. Feminismo para Jóvenas fue el primer libro que pudo darme algunas respuestas y me abrió el mundo de la literatura feminista en la que hoy encuentro tanto consuelo. 

Cuando empecé la carrera abandoné un poco esa costumbre. Hasta que llegó el 2020. En los viajes siempre suelo elegir un libro como compañero, y este verano le tocó a El segundo sexo de Simone de Beauviour. Pensando que cuando volviera a la ciudad se terminaría mi temporada de lectura, el mundo se encontró en una situación tan inesperada como desconocida. 

El encierro me presentó -como a todxs- algunos desafíos. Entre ellos, encontrarme con mi cabeza. No se si la palabra correcta sea difícil, pero si fue una sensación muy rara y que me llevó a situaciones que hoy veo como positivas. En medio de todo eso, me reencontré con los libros. 

Una las autoras que más me "acompañó" este tiempo fue Mariana Enríquez. Su novela Nuestra Parte de Noche y su antología Las cosas que perdimos en el fuego, crean un universo completamente propio. La autora mezcla el horror de fantasía con el horror de la realidad que a veces da mucho más miedo. Caracterizada más de una vez como valiente y sorprendente, Enríquez se encuentra entre las mejores autoras de América Latina y de mi biblioteca. 

Dos clásicos también fueron protagonistas en el aislamiento: Relatos de un naufrago y La naranja mecánica. Desde unos sentires muy diferentes a los propios, los protagonistas lograron generarme una empatía que me sorprendió más de una vez. Es irónico que ambas historias traten el tema de la soledad. 

Así, con algunos vaivenes, los libros fueron yendo y viniendo en mi vida durante estos tres años. Y tal vez su mística sea esa, la de estar siempre, esperando, hasta el momento justo.

Reseña

 

Página 12, Radar Libros 11/11/2020

Critica(r)

Por Carola Santiago 

La cautiva, de Inés Garland. La arquitectura del océano, Editorial Alfaguara, 2014.

 

Según el diccionario, el verbo criticar significa "examinar y juzgar una cosa, especialmente para determinar su bondad, verdad o belleza". Esta definición se encuentra al mismo tiempo, muy cerca y muy lejos de la crítica literaria. Tan cerca en cuanto al hilado fino, al escrutinio, al análisis. Pero tan lejos en lo que respecta a las sensaciones, el arte, la piel. 

Tal vez sea justo en el medio, o en ambos planos de manera simultánea, donde me posiciono para hablar de Inés Garland. 

Nació en Buenos Aires, la capital de Argentina, al calor de los años 60. Es periodista, traductora y escritora, y colabora en diarios y en talleres literarios. Su público es diverso, ya que se dirige sus escritos tanto a adultos como a jóvenes y niños. Es la primera autora latinoamericana en ganar el Premio Deutscher Jugendliteraturpreis por su novela Piedra, papel o tijera. Otros de sus títulos son “El rey de los centauros” (2006) y “Una reina perfecta” (2008).

Esta autora escribe desde los 10 años, pero nos ha hecho esperar ni más ni menos que 27 para deleitarnos con sus obras. Ella toma la cotidianeidad y la transforma en belleza, llevando a los lectores de la mano por un recorrido que a más de uno le resultará familiar. Las narradoras (que tal vez sean ella misma) desmenuzan su realidad de mujeres desde distintos planos como pueden ser la maternidad, las relaciones asimétricas del mundo adulto, sexualidades no permitidas, relaciones o desamores. Historias de las cuales podrían ser dueñas tus amigas, tus primas, tus vecinas. Y creo fervientemente, que eso es lo que atrapa y que intriga. 

"No es que no piense en los lectores: sé que estoy hablándole a alguien. Pero lo que quiero es que la historia se cuente de la mejor manera posible, y eso para mí garantiza un lector" cuenta Garland en una entrevista sobre su libro “Con la espada de mi boca” para la editorial Eterna Cadencia en 2019. En esa corta frase, revela su esencia como escritora y su manera de trabajar. 

“La arquitectura del océano” es una minuciosa selección de cuentos de la autora. Consta de seis universos que perfectamente podrían ser el mismo o todos diferentes. Una preadolescente y su amiga, una esposa aventurera, un profesor de yoga, un ayudante de casa de campo, una madre nostálgica y una mujer viajando en lancha, son algunos de los intrigantes personajes que encontrarán a lo largo de este libro. Los protagonistas se encuentran en constante tensión con la soledad, los sentimientos y su interioridad. También son los vínculos un lugar muy fuerte donde trabaja la autora, es en la complejidad de las relaciones humanas donde encuentra la fuente de su inspiración. 

Garland viene generando un clima determinado en sus cuentos. "El rayo verde" cuenta la historia de una familia compuesta por una hija y sus padres en unas vacaciones. La narradora es una pre adolescente que va y viene sobre su inocencia a la hora de relatar los sucesos. Ella va descubriendo el mundo adulto, la relación con su amiga, sus primeros encuentros con un chico y las personalidades de sus padres. En "Oscar" seguimos la historia de dos padres y dos hijas se van de vacaciones de invierno a una estancia en el campo, y la de un joven llamado Oscar. A lo largo del cuento vemos un mundo adulto tamizado por la percepción de la protagonista. Por último, en "Nada que hacer", una madre lleva de vacaciones a su hija y a sus tres amigas adolescentes, y cuenta los días del viaje dejando leer entre líneas sus propios sentimientos.

Como marcaba al principio, la autora va creando un clima de familia, de viajes, de intimidad. Pero es en "La cautiva" donde llega al clímax de todos estos aspectos y los materializa en una historia tan sencilla como atrapante. 

"La cautiva" se sitúa en Misiones, un paraíso híbrido que invita a la reflexión y el autodescubrimiento, y eso es lo que hace la protagonista de esta historia. El choque cultural y un viaje familiar, se entremezclan con algo mucho más profundo, con una "segunda historia", en palabras de Ricardo Piglia. Seguiremos de cerca un breve lapso de la vida de una madre y esposa, pero que nos devela mucho más. 

Audaz, concreta, seductora, son algunas de las características que identifican tanto a Inés Garland como a sus historias. Sin embargo, lo más cautivante de estos relatos, es sin duda lo que no se cuenta. Los secretos, los detalles que se deslizan sólo para el lector atento, la responsabilidad que le queda al mismo de terminar la historia por su cuenta. Pero no sólo, sino con dos grandes herramientas: una imaginación estimulada y una ansiedad por leer más de esta autora.

Cuentos de Inés Garland

 

Consigna: leer los cuentos de Inés Garland, subrayen qué elementos tanto de las historias, los tipos de narrador y los procedimientos se repiten o se relacionan entre sí, como para empezar a pensar la reseña.

El rayo verde

  Cuenta la historia de una familia compuesta por una hija y sus padres en unas vacaciones. La narradora es una pre adolescente que va y viene sobre su inocencia a la hora de relatar los sucesos. 

   La protagonista va descubriendo el mundo adulto, la relación con su amiga, sus primeros encuentros con un chico y las personalidades de sus padres. 

   Un recurso que me gustó fue el de que el cuento empieza y termina con la misma escena, creo que esto muestra como ella sigue repasando ese verano y va descubriendo cosas que en ese momento su ingenuidad no le permitió ver. 

La cautiva 

  Una familia de tres decide viajar a misiones para unas vacaciones diferentes convencidos (y casi obligados) por la madre. Además de con sus incomodidades y malos humores, se encuentran con una cultura diferente, los indios. Ninguno le da mucha importancia salvo la madre que decide hacer una expedición sola y es rescatada por uno de los indios.

  Durante la charla con el indio, la historia comienza a ponerse más profunda sin dejar de mantener la superficialidad del relato. El final del cuento, que puede interpretarse como abierto, devela sentimientos de la narradora. 

La perra de tres dientes

  Un profesor de yoga se embarca un sábado a la noche en busca de sus deseos con los que intenta luchar. Entra un boliche y se encuentra con una mujer, con la que tiene sexo en un cuarto de hotel, su particularidad es que sólo tiene tres dientes.

   El protagonista tiene una especie de doble vida, una "aceptable" y una que le da vergüenza, por eso la odia. En el encuentro con la mujer tiene recuerdos de su infancia. 

Oscar

  Dos padres y dos hijas se van de vacaciones de invierno a una estancia en el campo. Están en la historia otra pareja y Oscar, un ayudante de la casa. 

L  La hija mayor escucha a los adultos e intenta analizar sus discusiones. En paralelo, se enamora platónicamente de Oscar. 

  A lo largo del cuento vemos un mundo adulto tamizado por la percepción de la narradora. 

Nada que hacer

  Una madre lleva de vacaciones a su hija y a sus tres amigas adolescentes. La mitad de la historia transcurre en los viajes en auto, y la otra mitad en el lugar donde paran. 

  La narradora, la madre, cuenta los días del viaje y deja leer entre líneas sus propios sentimientos. El cuento termina con un giro inesperado que da a entender un acto de su parte que los lectores no sabíamos. 

El último muelle

  Es una historia de desamor, la que recuerda la protagonista durante su viaje de vuelta de una isla del tigre en la lancha colectiva. 

  El cuento cuenta con muy pocos diálogos, siendo los pensamientos de la narradora los que toman protagonismo.  

Similitudes entre los cuentos

  familia, hijas mujeres, clase alta/acomodada, viajes, sexualidades no permitidas, mensajes difíciles de interpretar para una niña

  Los cuentos de Inés Garland tienen muchas similitudes entre sí. Los personajes suelen ser familias, generalmente conformadas por un padre y una madre aunque a veces se encuentra sólo una mujer. La presencia de hijas mujeres es también muy importante, en algunos cuentos son pequeñas y en otros adolescentes. Los viajes son una característica recurrente, generalmente de vacaciones. Los personajes suelen ser de una clase media-alta o acomodada. 

  Un punto importante es una suerte de sexualidad no permitida que aparece en la mayoría de las historias: la de un padre con la amiga de su hija, un profesor con una mujer que lo avergüenza, una esposa con el indio, una niña con un ayudante de la casa, una madre con un adolescente y un breve amor. 

  Por último, cabe destacar el rol de las narradoras. Garland en más de un cuento relata la historia desde un lugar asimétrico, en el que el lector comprende cosas antes que la protagonista. 

 

Nota de lectura "Tribulaciones de un comentarista de libros”, Luis Fernando Afanador

 

Consigna:  leer y hacer un comentario/nota de lectura, en donde subrayen qué procedimientos o recursos les pueden ser más útiles para escribir las reseñas.

Se pueden establecer varios puntos en el desarrollo del texto de Afanador. En primer lugar habla del azar en cuanto al momento de escoger un libro. Luego se posiciona dentro de lo que el llama la crítica celebratoria que tiene que ver con sólo escribir sobre libros que te hayan gustado. También cuenta que es un reseñador, y lo sintetiza de la siguiente manera: "Creo que es un híbrido. Es una rara especie que es mitad crítico y mitad divulgador; es un lector bien informado: el espectro es amplio." 

El autor hace un recorrido concreto y conciso sobre lo que tenemos que saber sobre los criterios de selección y las formas de abordar la escritura de reseñas.